No siempre es fácil ser el extraño, pero este joven elefante no parece molestarse.
El ternero se unió a su manada de elefantes blancos para darse un baño en su recinto cerca de la Pagoda Uppatasaпti en Naypyitaw, la capital de Birmania.
El bebé se mantiene con cinco elefantes blancos, todos los cuales han sido capturados por la voluntad por su coloración habitual y son vistos como signos sagrados de buena fortaleza, paz y riqueza en la Birmania predominantemente budista.
Extraña apertura: una cría de elefante juega con su familia de elefantes blancos en Naypyitaw, la capital de Birmania
Cinco de los elefantes blancos fueron encontrados y capturados en Birmania entre 2001 y 2010, y ahora viven en la capital.
Los elefantes blancos han sido venerados en muchos países del sudeste asiático, como Birmania, Tailandia y Laos.
Históricamente, los elefantes blancos eran mantenidos por las moarcas y se consideraban un símbolo de poder real y prosperidad.
Mapy en Birmania todavía cree que los elefantes blancos sólo surgen en lugares donde la práctica del budismo florece y los gobernantes gobiernan con justicia.
Familia actual: cinco de los elefantes blancos fueron encontrados y capturados en Birmania entre 2001 y 2010, y ahora viven en la capital.
Hora de la ducha: el ternero se unió a los demás para darse un baño en su recinto cerca de la Pagoda Uppatasaпti en Naypyitaw.